Por Javier Atance Ibar. Conocí esta innovadora iniciativa hace unos años de la mano de Javier Fernández Piera que me regaló unas entradas y me explicó cómo funcionaba esta maravilloso proyecto salido de su factoría CPC Cooking Ideas y que cómo su nombre indica llevan más de un cuarto de siglo cocinando ideas con gran creatividad, entendida ésta como capacidad de generar nuevas ideas y ponerlas en práctica.
El Vermut sabatino, se posiciona como un paso entre el hambre y la sed, un momento para quedar y charlar sobre las experiencias de la semana, antes de ir a comer. ¿Qué mejor que disfrutarlo amenizado por la música siempre agradable de Bach?
Desde hace cuatro temporadas, de octubre a mayo, un sábado al mes, las palabras Bach y órgano están unidas indisolublemente, pero la verdadera novedad es unirlas a la palabra vermut y ha sido un gran descubrimiento que si no conoces, te invitamos para la siguiente ocasión, el próximo mes de marzo.
Las interpretaciones de órgano en cada sesión son en el majestuoso y gigantesco órgano Grenzing de la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional que nos asombrará por su riqueza en timbres, sonidos, y colores musicales siendo esta la cuarta temporada que se programan estos conciertos y que a la vista de su indiscutible éxito se seguirán programando en temporadas sucesivas, La historia de ese órgano nos recuerda que fue a finales de 1987, cuando el Instituto de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) le encargó la construcción de dicho órgano a uno de los organeros más importantes del mundo, Gerhard Grenzing, afincado en España. El instrumento, (el 61º para el autor alemán), con sus 18 toneladas de peso, 12 metros de altura, 5.700 tubos y más de 25.000 horas empleadas en el proyecto de construcción y armonización, es hoy en día uno de los mayores del mundo.
El mejor y más esperado concierto de esta temporada llegará el 10 de marzo y nos lo ofrecerá el insigne organista francés Thomas Ospital, para muchos uno de los organistas más extraordinarios del mundo, que con 27 años ya ha tocado en las salas más importantes del mundo. Estará acompañado por los Pequeños Cantores de la JORCAM, dirigidos por Ana González, para interpretar un estreno absoluto para órgano y coro de niños, primer encargo del Centro Nacional para la Difusión Musical, (CNDM), para este instrumento de una obra del compositor David Azurza, titulada Viaje a Nzali.
Thomas Ospital nació en el País Vasco francés estudiando en los conservatorios de Bayona y París con los mejores profesores. Terminó la carrera obteniendo cinco Primeros Premios en las clases de órgano, improvisación, armonía, contrapunto y fuga. Ha ganado importantes concursos de órgano y está llamado a ser una figura de talla mundial en el mundo de la interpretación con órgano.
Otros conciertos de órgano programados para culminar esta temporada serán:
24 de marzo: Juan María Pedrero, organista zamorano que se formó, entre otros, con una de las organistas más importantes del siglo XX, Marie-Claire Alain, y ha sido organista titular en la residencia del Sapporo Concert Hall de Japón.
14 de abril: Iveta Apkalna, organista letona se encuentra en un punto muy importante de su carrera, con giras por las mejores salas del mundo y tocando como solista con grandes orquestas, recientemente nada menos que con la Orquesta del Concertgebouw de Ámsterdam.
19 de mayo: Paolo Oreni, pocos organistas hay tan explosivos y espectaculares como este italiano. Su dominio técnico es apabullante, y es uno de los improvisadores más destacados de la actualidad, dando más de 100 conciertos al año en los más importantes auditorios e iglesias del mundo.
A la vista de los grandes organistas que tenemos en el programa, no olvidemos los aficionados a la buena música barroca, que un sábado al mes, en el Auditorio Nacional tenemos una cita a las 12.30 con Bach. La apertura de la zona de degustación será una hora antes, a las 11.30.
Para que se aprecien hasta los mínimos detalles de cada concierto, ya que el organista, como exige la interpretación en este instrumento, está de espaldas al público, se retransmitirán por pantallas gigantes en el interior de la sala, todos y cada uno de los secretos del mismo, acercándonos las manos y los pies del organista a los teclados y el pedalier.
Otra sorpresa después del concierto, es que podemos saborear diferentes aperitivos en los puestos de comida que nos encontraremos en el enorme vestíbulo, todo esto amenizado por una banda a ritmo de jazz con arreglos e improvisaciones sobre música de Bach por los más importantes músicos de jazz en el panorama español: Daniel García, Chema Saiz, Toño Miguel, Noah Shaye, Ariel Bringuez, Michael Olivera, Pablo Gutiérrez, Luis Verde, Norman Hogue o Claudio Constantini. Una buena oportunidad para abrirse a la mejor música del Barroco, conocer uno de los instrumentos más complejos que existen y disfrutar de un tradicional vermut y un buen aperitivo en el recibidor del Auditorio Nacional.
Respecto a los precios, son tan populares que podemos acudir en familia. Las entradas son de 5 € por butaca y en la propia taquilla del Auditorio, para los menores de 26 años, tan sólo 3 euros.
El impresionante órgano del Auditorio Nacional está ubicado en la Sala Sinfónica con una capacidad de 2.324 y cada sábado se llena para escuchar las composiciones intemporales del “viejo peluca”, como llamaba Fernando Argenta a nuestro querido Juan Sebastian Bach. Los miles de espectadores que han pasado por estos conciertos de órgano demuestran el interés por este gran instrumento y por un genio musical alemán como Bach que está más vivo que nunca.
