La XXV Cumbre Luso-Española, celebrada el 9 de mayo en Oporto, ha puesto en evidencia que los dos países que forman la península ibérica son algo más que dos países que han vivido de espaldas tantos años.

España y Portugal nunca hemos sido capaces de mantener, en estos años de crisis, una voz política común para saber imponernos en el marco europeo”, afirmaba recientemente en Madrid Mário Soares, ex presidente y primer ministro de Portugal. “Nuestros dos Estados ibéricos atraviesan por un espléndido período en sus relaciones, independientemente de los gobernantes que los dirijan. Pero nunca hemos sido capaces de mantener, en estos años de aguda crisis, una voz política común, o concorde cuanto menos, para saber imponernos, en el marco europeo, con la suficiente fuerza como para ser escuchados”.

Quinto país del mundo en extensión, 195 millones de habitantes y séptimo mayor mercado a nivel global. Los españoles y portugueses que van allí, triunfan.

El presidente de  la Fundaçao Getulio Vargas, la institución formativa más prestigiosa de uno de los países hacia los que todo el mundo mira y por cuyas aulas pasa la élite brasileña de la política y los negocios, no entiende por qué no hay más españoles que emprendan una aventura allí. “No entiendo por qué los españoles no cogen más el avión, especialmente los jóvenes, y van a Brasil a hacer negocios. Pueden hacer fortuna allí, porque somos muy similares culturalmente”. Carlos Ivan Simonsen invita a los profesionales, titulados y empresarios de nuestro país a emprender y probar suerte en el suyo, a establecer relaciones comerciales allí. “Triunfarán”, asegura con rotundidad.

Proexport es la entidad encargada de la promoción de las exportaciones de la Inversión Extranjera Directa y del turismo en Colombia. A través de su red internacional, ofrece acompañamiento y asesoría a los empresarios interesados en hacer negocios.

Colombia cuenta con el sello de inolvidable según los viajeros que ya la han visitado. Sólo en este país se puede caminar por playas en medio de un desfile de tortugas marinas, descubrir una ciudad perdida, navegar en compañía de ballenas o recorrer lugares históricos inmortalizados en célebres obras literarias. Eso es el realismo mágico, eslogan sobre el que gira la nueva estrategia de turismo de Colombia a nivel internacional.