Levanta un fondo de 130 millones para invertir en deuda de pymes. Banco Espiritu Santo ha llamado a la puerta de algunos de los principales family office del país para presentarles un revolucionario vehículo que ha puesto en marcha y con el que promete retornos de entre el 8% y el 12%. Se trata de Agra, un fondo que ha estructurado como sicav luxemburguesa y que va dirigido a financiar pymes de España y Portugal.
Con un objetivo máximo de 130 millones y un mínimo de 70 millones, este fondo se centra en deuda senior, mezzanine y similares, ligadas a compañías que están quedándose fuera de la financiación bancaria tradicional y que por su tamaño (menos de 100 millones de ebtida) tampoco llegan a beneficiarse de la fiebre de emisiones de bonos de alta rentabildiad (high yield)
La entidad lusa está convencida de que se ha abierto una ventana de oportunidad en este nicho de mercado, derivada de la compleja situación que vive el sector financiero, y que probablemente desaparezca en un par de años. De ahí que haya estructurado su nueva apuesta con un periodo de inversión de sólo dos años, mientras que el plazo de vida del fondo se extiende a seis, con la posibilidad de dos prórrogas de doce meses cada una.
Equipo gestor
La entidad lusa participa en el proyecto a través de Espirito santo Investment Bank, mientras que la gestión recae sobre la firma Karve Capital, que actúa como asesor y bajo cuyo paraguas se cobija el equipo gestor, que como muestra de compromiso se implica patrimonialmente en el proyecto. De hecho, participa en un 49% en el fondo, mientras que Banco Espirito Santo controla el otro 51%.
Agra deja fuera de su campo de actuación operaciones en el sector inmobiliario y financiero, y prevé llevar a cabo rigurosos procesos de due dilligence antes de adquirir ningún activo. Además, la entidad lusa tiene un compromiso de inversión de hasta el 10%, con un volumen máximo de 15 millones, y cobrará un fee (honorario) directamente ligado al rendimiento, posterior a que los inversores reciban todo el dinero aportado más un retorno mínimo