Las grandes fortunas extreman la cautela y guardan el dinero en caja en plena tormenta El dinero es miedoso por naturaleza. Aunque todavía no ha cundido el pánico, los patrimonios medios y altos empezaron a preocuparse por la indefinición política y han preparado un Plan B por si el escenario de un Gobierno de PSOE con Podemos se hace realidad. Los March, Koplowitz, Ortega o Jove son algunos de los apellidos ilustres que anticiparon la tormenta financiera actual y ya en la recta final del pasado ejercicio optaron por elevar la tesorería de sus sicavs.
La tormenta financiera con que ha arrancado 2016 ya dejó ver sus primeros síntomas en la recta final del año pasado, unas advertencias que las grandes fortunas del país tomaron muy en serio y que han quedado reflejadas en los folletos de cierre de año de sus sicavs, donde se puede comprobar cómo todas ellas empezaron a construir diques de contención para intentar protegerse ante la volatilidad en que operan los mercados.
Una de las medidas de cautela más significativas en la última parte de 2015 fue elevar la posición de liquidez, es decir, guardar en caja el dinero ante la falta de oportunidades claras de inversión, u optar por depósitos y repos que permitan tener el dinero a salvo aunque la rentabilidad sea mínima. Los March, Alicia Koplowitz, Sandra Ortega, Felipa Jove, Juan Abelló, Leopoldo del Pino o Luis Fernández Somoza son solo algunos ejemplos de las grandes fortunas que ya antes de las navidades optaron por reducir riesgo y poner su dinero a salvo.
La desaceleración de China, el desplome del petróleo y la caída de las materias primas son las principales amenazas a las que se enfrentan los mercados en opinión de los expertos contratados por los mayores patrimonios del país para gestionar sus fortunas. Estos también tienen en el centro de su radar las políticas de los bancos centrales, especialmente la Reserva Federal (Fed) y el Banco Central Europeo (BCE), al que advierten que la inflación va a continuar alejada de su objetivo próximo al 2%, sin olvidar la evolución de las economías emergentes, y la evolución de las principales divisas.
Inestabilidad política
Para que llevarse el dinero a un paraíso fiscal, si pueden tenerlo aquí en una sicav en plena producción de intereses y pagando el 1 % de impuestos sobre el beneficio. Que los ricos quieran pagar menos impuestos puede ser discutible moralmente, pero tiene su lógica. El problema es cuando lo hacen utilizando descaradamente instrumentos que no están diseñados por las leyes para ese uso, es el caso de las SICAV. El importe de lo defraudado por estas IIC durante los últimos 20 años es de tal magnitud que podría ayudar a rebajar el déficit del estado de una forma importante. La legislación española sobre esta materia exige muchos controles a las entidades financieras para evitar esta utilización, pero no se cumple. Todo este funcionamiento lo cuento con detalle en el libro que he escrito sobre mi experiencia de 10 años en el Grupo Deutsche Bank. Interesados en el libro en GOOGLE “Mis memorias en el Deutsche”.
Pero un plan B consiste en llevarse el dinero de España o, al menos, estar preparado para ello: "Hay gente con 20 millones que se ha llevado 5 ó 10 por una mera cuestión de diversificación: si siempre es arriesgado tener todo el dinero en un solo país, ahora mucho más con la incertidumbre actual", añaden en una firma española especializada en banca privada (gestión de patrimonios). "Al menos, han abierto cuentas en otros países para estar preparados en caso de tener que sacar el dinero en el futuro", añade.
Destinos estables y con centros financieros ¿Adónde? Los profesionales consultados señalan que buscan países estables y predecibles que a su vez sean centros financieros importantes: "En Europa hay tres, que son Luxemburgo, Reino Unido y Suiza", explica un banco de este último país con presencia en España, que añade que "no se trata de buscar el secreto bancario ni de ocultar dinero negro, porque todo lo que está saliendo es dinero que está declarado y que ha pagado sus impuestos en España".
Otra entidad extranjera consultada discrepa y señala que, aunque no se trate de ocultar nada, Suiza tiene otros problemas que hacen que los españoles prefieran Luxemburgo o Londres como destino. "Suiza es más ineficiente desde el punto de vista fiscal y regulatorio al no ser Unión Europea, y los costes son mucho más altos que en Londres o Luxemburgo, aparte de la cuestión reputacional".
"En general, el ahorrador español -salvo los grandísimos patrimonios- quiere tener su dinero en España y pagar aquí impuestos, siempre buscando la mejor fórmula para tributar lo menos posible, como es lógico. Por eso, le resulta bastante traumático tener que llevarse el dinero fuera y sólo lo hace si el riesgo de sufrir un perjuicio es muy alto.
Eso es lo que teme ahora y que se puede hacer realidad en las próximas semanas", explican en el banco suizo citado. "Afortunadamente, vivimos en un mundo con libertad de movimiento de capitales", subraya el banco privado español.
Fin de las sicav y subidas de impuestos
¿Qué es lo que le da miedo al dinero de un posible 'frente popular'? Para empezar, la supresión del ventajoso régimen actual de las sicav, medida que pretenden adoptar tanto PSOE -pese a que se estableció bajo sus Gobiernos- como Podemos: "Si cambian el régimen de las sicav, trataremos de buscar la mejor fórmula dentro de la nueva legislación, o bien alternativas como fusiones de sicav, carteras de fondos, etc. En el caso de que no sea posible nada de eso, habrá que llevarse las sicav a Luxemburgo", explica otro profesional. El patrimonio de estos vehículos de inversión creció el 5,4% en 2015 hasta 34.082 millones.
Pero no se trata sólo de eso, sino de una subida de impuestos generalizada al ahorro: según han ido anunciando, pretenden reinstaurar el impuesto del patrimonio, poner una tasa a los depósitos, e incluso es posible que impongan otra a los fondos de inversión. "Los más asustados temen incluso un control de capitales, es decir, una especie de corralito al estilo del que ha impuesto Syriza en Grecia. Lógicamente, si piensas que eso puede ocurrir, te llevas tu dinero, o al menos una parte, a un país más fiable", sentencia una de las fuentes consultadas.
El problema de fondo no es tanto el pagar más o pagar menos impuestos. el problema es la inseguridad jurídica y la posibilidad de una confiscación del patrimonio mobiliario . Tambien hay que incidir en la posibilidad de un corralito e imposibilidad de invertir en valores y fondos extranjeros desde España. Cualquier fortuna que este bien gestionada se diversifica en tipos de activos y geográficamente . Los ricos deben observar el origen de su fortuna y preguntarse si no pueden hacer algo más para contribuir a que nuestro país se consolide como una democracia abierta y una sociedad más justa. Salir por patas a las primeras de cambio sólo puede ayudar a los populistas de todo a cien.
Las grandes fortunas han estado "exonerando" miles de millones a paraísos fiscales en los últimos 10 años. Ninguna novedad. Creo que en el 2014 y el 2015 batimos records históricos de evasión de capitales y no había ningún "frente popular". Ergo, esta afirmación de los capitsles huyen porque "viene el coco" es una justificación que sorprende bastante que se utilice como argumento político.