Pocas cosas hay en el mundo que emocionen más que la música y el fútbol. No se puede entender el principio y el final de los partidos sin los himnos que nos ponen las emociones a flor de piel y nos humedecen los ojos sintiendo unos colores. Por Javier Atance
La historia de Placido Domingo con el Real Madrid viene de lejos y tuvo su punto culminante en el año 2002 cuando en un Concierto de gala, presentó en Chamartín con su portentosa voz, el Himno del Centenario, escrito por José María Cano con el nombre de “Hala Madrid”. En palabras de Sidney Lanier: "La música es amor en busca de palabras" y los himnos tienen esa particularidad de encontrar las palabras sencillas y repetitivas para expresar por medio de la música, un sentimiento capaz de ser reproducido por miles de voces al unísono.
El 29 de junio de 2016, miércoles, tuvo lugar en el gran escenario de los sueños que representa el estadio Santiago Bernabéu un espectacular concierto que fue el gran homenaje que Plácido Domingo se mereció en el año de su 75 cumpleaños, un concierto para la historia del Real Madrid y de Plácido Domingo, socio de honor del club.
Son muchos y de diferentes géneros los artistas que tenían confirmada su presencia en este macroconcierto. Será muy difícil, por no decir imposible, juntar semejante cantidad de primeras figuras en un mismo escenario alguna otra vez, pongamos atención a nombres que por allí pasaron: el propio Plácido Domingo, el toscano Andrea Bocelli, el cantante mexicano Alejandro Fernández, la magia andaluza de Pablo Alborán, el ganador de varios Premios Grammy como Juanes, la calidad y categoría como compositor y cantante de Alejandro Sanz, la voz con un gran futuro internacional como la de David Bisbal , el embrujo y la elegancia bailando de Sara Baras, la calidad y potencia operística de Il Volo, el inolvidable componente de Mecano y autor del Himno del Centenerio José Mª Cano, el brillante e innovador solista de violín Ara Malikian, los nuevos boleros de Café Quijano y otros muchos más cuya lista es interminable: Pablo López, India Martínez, Rozalén, Carlos Baute, Plácido Domingo Jr, Dvicio, Diego Torres, Pablo Sainz Villegas, Arturo Sandoval, Los Secretos, Diana Navarro, José Mercé…
Todos ellos fueron presentados por otro gran madridista, Bertín Osborne, que actuó también junto a sus compañeros cantantes antes citados, que contaron además con la participación de la Orquesta Titular del Teatro Real de Madrid, dirigida por Eugene Kohn y Pablo Heras Casado, por si algo faltaba en esta reunión de grandes figuras de la música.
Todos conocemos la biografía de Plácido Domingo como cantante de ópera, en sus diferenciadas facetas de tenor y barítono, director de orquesta y actual director general de la Ópera de Los Ángeles. Nació en Madrid, de familia de músicos, sus padres eran cantantes de zarzuela. Debutó con apenas dieciséis años y desde esa temprana edad no ha dejado de recorrer mundo y deleitar en auditorios, teatros y estadios con su voz, unas veces en solitario y otras en compañía, como su experiencia con Los Tres Tenores que popularizó la ópera, desarrollando una carrera profesional llena de éxitos a lo largo y ancho del mundo.
Este gran concierto respiró además solidaridad. Por eso todos sus beneficios serán destinados al desarrollo y potenciación de las escuelas sociodeportivas de la Fundación Real Madrid en México, apadrinadas por el propio Plácido.
Ser un músico reconocido y prestigioso no está al alcance de todos los músicos. A Isacc Stern, genio del violín, le preguntaron una vez: “¿El talento nace con la persona?” y respondió así: “Sí, con talento se nace, pero el músico se hace”. Algo así debió suceder con Plácido Domingo que nació artista, pero lo de ser músico y llegar a la cima de su carrera musical ha sido un premio a años y años de esfuerzo y sacrificio que ahora se le han reconocido y valorado.
El D.N.I de las personas indica cuando está próxima la retirada de las tareas profesionales y el de Plácido Domingo con 75 primaveras, señala que no le quedan muchas más sobre los escenarios y más teniendo en cuenta las palabras del propio cantante: “No quiero cantar ni un día menos de lo que pueda, ni un día más de lo que deba”, por tanto, fue una oportunidad única e irrepetible de ver en acción y disfrutar de una de las mejores voces españolas en la historia de la música, que también afirmaba en otra ocasión: “La decisión de dejar de cantar será difícil, pero hay que tomarla. En el momento que no pueda cantar, tendré que darme cuenta yo, porque si se da cuenta el público, estoy mal”.
Alguien dijo: “La música nos alegra, nos entristece, nos activa, nos hace bailar, nos emociona…, cantantes y compositores son los responsables de hacer brotar los sentimientos que nos provocan las notas musicales cuando llegan a nuestros oídos”.
Gracias, Plácido, por tantos años de regalarnos tu voz, tu buen hacer y tu sonrisa.