Con este título se presentó en el Hotel Ritz de Madrid el pasado 5 de noviembre el concierto de presentación de la bodega Heredad de Urueña, interpretado por los músicos de Urueña formado por Luis Delgado, (zanfoña, laúd, panderos y darbouka), César Carazo, (viola y canto), Jaime Muñoz, (axabeba, cornamusa y chalumeau) y la colaboración especial de Amancio Prada. Por Javier Atance
Con un sonido fantástico que nos remontó a otros tiempos y a otras músicas, interpretadas con instrumentos que pocas veces tenemos la oportunidad de disfrutar en directo, nos hicieron un recorrido por obras musicales cuyas letras tienen como protagonista el vino desde tres perspectivas: la cristiana que representa especialmente Alfonso X el Sabio, la tradicional Andalusí y la sefardí de Isaac Levy. Fueron la más perfecta banda sonora a esta experiencia y a esta presentación en sociedad en un marco irrepetible como fue el más emblemático de los hoteles de la capital: El Ritz.
Terminado el concierto, se pasó a degustar la gastronomía de las tres culturas con nueve magníficos platos salados y seis dulces elaborados bajo la dirección del chef Jorge González del Hotel Ritz que hicieron las delicias de todos los asistentes.
La muestra gastronómica estuvo armonizada con los vinos de Pago Heredad de Urueña, S. L.: Moisés, Santo, Toralto y Forum, servido bajo la batuta de Gemma Vela, sumiller del Hotel Ritz.
Una vez más fuimos testigos de que el sabor del vino compartido no tiene igual y que sigue siendo, como siempre ha sido a lo largo de la historia, un refinado placer gastronómico y que tomado en pequeñas dosis, constituye por sí mismo un gran complemento alimenticio, siendo además una grata compañía para todo tipo de platos sean cuales fuesen sus ingredientes; maridaje lo llamamos ahora, sabiendo que un trago de buen vino siempre es agradable al paladar, es detalle de buen gusto, calma la sed, resalta los sabores de los alimentos, aporta energía, estimula el apetito, relaja y ayuda a compartir amistad, conversación y sociabilidad.
Y así, primero con una degustación de páginas musicales históricas dedicadas al vino en esas tres culturas y después entre plato y plato, y sorbo a sorbo, transcurrió una velada inolvidable que estuvo precedida por palabras importantes como las de José Luis Rodríguez León, que presentó el proyecto dándonos un paseo por todas las posibilidades que tiene el mundo del vino en el que todos debemos aprender a descubrir tantas y tantas emociones ahora y en el futuro.
Importantes personalidades asistieron a esta presentación que fue un evento exclusivo, modélico en su preparación y en su desarrollo, ejemplo a seguir y reflejo de una manera de hacer las cosas con categoría, ilusión y trabajo en equipo, cómo la familia Rodríguez León nos ha demostrado.
Y un detalle final de categoría personal y empresarial, cuando terminó el acto de presentación no se limitaron a despedirse sin más, si no que obsequiaron a todos los asistentes con un estuche que contenía una botella de su vino Forum, envuelto en un pergamino encabezado por el escudo de la Heredad de Urueña con el siguiente texto, que recoge todo lo que esa botella encierra y la filosofía de la familia Rodríguez León sobre el mundo del vino:
Aquí dentro encontrarás Miles de horas de sol y algo de lluvia Noches frías y días ardientes Sabor a gloria y ese aroma de tus raíces Mucho esfuerzo, ilusión, verdad, superación… y la alegría perfecta de los sueños cumplidos Encontrarás la celebración de la vida, gozo, PASIÓN GRACIAS por compartir con nosotros esa PASIÓN por la vida y los vinos de calidad.
Termino yo también dando las gracias a ellos, a todos los que han levantado esta nueva bodega, directivos que la han planificado, técnicos que han elaborado estos vinos, viticultores a pie de cepa, a todas y cada una de esas manos invisibles que han conseguido transformar un sueño y convertirlo en un proyecto que ahora concretan en unos productos vinícolas perfectamente elaborados y listos para ser consumidos y disfrutados con todas las garantías en cualquier lugar del mundo. Muchas gracias por vuestro buen hacer y profesionalidad.
